Espacio C es la primera de una serie de intervenciones en las salas de capacitación de la empresa Coca-Cola Femsa, que busca introducir ambientes creativos para el desarrollo de sus empleados y cuya planta laboral asciende a 65,000 personas.
Además de la capacitación formal que recibe todo el personal, la compañía pretende generar una cultura de autoformación y la fórmula para detonarla serán los espacios con ambientes atractivos.
Los encargados de llevar a cabo este proyecto son Brenda Grissel González Aguilar, gerente de Capacitación, Ramón Gorbea Chávez, líder del proyecto, y la firma de arquitectos ROW Studio, que desarrollará el primer proyecto: la sala denominada Espacio C (C por Coca-Cola, capacitación, calidad, compromiso y creatividad), que se ubica en el Centro de Distribución Mixcoac, en el sur poniente de la Ciudad de México. 
Espacio C Mixcoac tiene tres salas individuales que se pueden unir para actividades comunes o separar para diferentes usos: una mediateca, un espacio para snacks, una tienda de regalos, instalaciones para equipos de cómputo y áreas de guardado.
Dos salas son de pequeño formato con capacidad para ocho personas, pensadas para dinámicas de grupo, tormentas de ideas, salas de lectura y juntas informales. Una sala más grande se destina para los cursos formales de capacitación, conferencias y presentaciones.
Las tres salas están dispuestas en forma radial en torno a un mueble fijo multifuncional, donde se concentran los usos de la mediateca, el área de snacks y la tienda.
Estos espacios están confinados por un muro que sirve como barrera acústica y visual, aislando la sala de la ciudad y del resto de las actividades de la planta.
En su cara exterior, el muro está pensado como una superficie continua que se pliega hacia los plafones y hacia los pisos.
Las paredes y el plafón están recubiertos con pintura epóxica roja mientras que el piso está hecho de una resina acrílica de alta resistencia. El área exterior, además de servir como filtro y vestíbulo hacia el resto de la planta, puede ser usada para el montaje de exposiciones o elementos visuales complementarios a los cursos impartidos en el interior. 
Para ventilar los espacios y dar iluminación natural al interior de las salas, los arquitectos realizaron perforaciones con una inclinación de tres grados en el muro; estas perforaciones salen tanto del piso como del plafón, recortando de igual manera los pliegues.
A partir de estos cortes surge una serie de franjas con la misma inclinación de tres grados en color blanco que se abren hacia el exterior, y en diferentes colores que se cierran hacia el interior. Estas franjas se prolongan hasta los muros opuestos enfatizando así la continuidad de las superficies.
Los colores del interior de las salas corresponden a los de las diferentes marcas de Coca-Cola y cuando éstos se cruzan en algún punto revelan el color básico común entre las dos franjas intersectadas.
El mobiliario puede ser reconfigurado para adaptarlo a las diferentes actividades de la sala y garantizar así la máxima flexibilidad de uso. Los gráficos exteriores son una composición de elementos animales y vegetales, que a su vez forman olas que evocan el logo de Coca-Cola para reforzar su branding.
En la parte interior del espacio, los arquitectos integraron todos los requerimientos impuestos por el cliente como: los lemas que describen los valores de la compañía, armonías de color que representan las diferentes líneas de productos de la marca, elementos que forman parte del mensaje visual de Coca-Cola (burbujas, botellas, corcholatas, olas y palabras clave utilizadas en las diferentes campañas de publicidad).
A diferencia del gráfico exterior, el interior puede ser visto como una serie de viñetas individuales o como un gran gráfico continuo.
Los muros del interior de las salas están recubiertos con un acabado antigraffiti que permite usarlos como pizarrón y encapsula los viniles de los gráficos protegiéndolos de cualquier daño exterior.
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