La semana pasada se inauguró el Museo de la Memoria, obra bicentenario. Este proyecto fue resultado de un concurso abierto, donde Plataforma apoyó la difusión de este concurso a nivel internacional, llegando propuestas de varios países. Finalmente, el primer lugar fue para Estudio América, oficina de Sao Paulo, Brasil.
Menciono esto ya que creo que el edificio tiene bastante de la tradición paulista: un volumen simple, que se la juega en la estructura y en construir grandes luces exteriores e interiores, con terminaciones sencillas que dejan en todo momento a la estructura hablar por sí sola.
Tuve la oportunidad de recorrer el edificio junto a los arquitectos de Estudio América luego de su inauguración, donde me contaron más sobre el proyecto y su proceso. Y esto del proceso es bastante importante, ya que durante el desarrollo del proyecto se hicieron varios ajustes especialmente en cuanto a superficies, estacionamientos, auditorio, y además hubo tiempos super cortos dada la necesidad de inaugurarlo antes de las elecciones. Sin embargo, el proyecto se mantuvo fiel a la idea original de una plaza hundida con un volumen volando sobre ella.
La gran plaza que antecede al edificio nos da la distancia suficiente para poder dar cuenta de esto, teniendo el volumen completo a la vista, el que gracias a la sombra (muy marcada estos días de verano) en la pequeña separación que existe en los puntos de apoyos da la sensación de despegarse de estos. Una serie de graderías en el lado norte permiten que ese patio pueda albergar eventos de mayor escala. Por los días de la inaguración esta plaza se encontraba con una reja perimetral por temas de control, habrá que ver que pasa en los próximos meses.
El ingreso al edificio es por debajo del volumen, en el punto más bajo de la plaza. Este ofrece un generoso espacio de sombra, y además se conecta con la estación del metro Quinta Normal. Luego de pasar la recepción, se encuentra una sala de exhibiciones y las circulaciones. En este hall se encuentra una escalera que conecta visualmente el acceso, el exterior y el nivel inferior (administración, estudio y almacenamiento), llevando luz natural a estos. Luego de pasar por esta escalera uno se encuentra con un espacio de triple altura con los diversos espacios de exhibición al centro y una caja volando. Tras la vigas vierendel que estructuran el volumen se encuentran más espacios de exhibición por el borde norte, mientras que las circulaciones se encuentran por el lado sur.
En estos espacios los materiales y terminaciones son bastante sencillos, sin ningún alarde. Lo que me gusta de este espacio central son las relaciones visuales entre todos los niveles, y con el interior y parte superior de esta caja.
A pesar de verse como un proyecto algo complejo, la verdad es que es bastante simple, las circulaciones y espacios son bastante claros. Les recomiendo darse una vuelta.
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