Desde principios de este mes Apple y Samsung están intentando llegar a un acuerdo amistoso antes de volver a meterse en un nuevo y larguísimo juicio como el que les ha tenido ocupados los últimos años en California. Según cuenta Florian Mueller de FOSS Patents, parece que el principal problema para poder llegar a ese acuerdo es precisamente una condición que Apple pide a Samsung a cambio de licenciar sus patentes, más o menos como ya hizo anteriormente con HTC hace más de un año.
Esa condición es simple… se trata de una prohibición que impide copiar los productos de la manzana. HTC aceptó el trato – pero parece que en Samsung ése es el principal problema para llegar a un acuerdo, quizás porque gran parte de su estrategia podría estar basado en algo así, y de hecho, está demostrado que las multas y sanciones o juicios que pueda haber en el futuro suponen un coste aceptable dentro del río de ganancias que consiguen.
Lo más probable en esta situación es que ambas compañías comiencen de nuevo este segundo baile de juicios. Si no llegan a un acuerdo ahora, tendremos noticias sobre las batallas legales que se libren durante al menos año o año y medio más – y mientras tanto, ambas compañías seguirán trabajando juntos en la fabricación de componentes para el iPhone. Toda una relación de amor y odio.
Vía: Appleinsider.
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