Conoce a David, el androide del futuro (Prometheus)

Estamos a menos de dos meses del estreno de Prometheus, y tanto Ridley Scott como la gente de Fox están haciendo un amplio uso del “formato viral” para promocionar su película. Como muchos ya deben saber, Prometheus contará con un androide en su reparto, David, interpretado por Michael Fassbender. En esta oportunidad, David se presenta no sólo como un simple producto, sino también como un ser versátil, aparentemente sensible, y potencialmente más humano que los humanos mismos, algo que a decir verdad, también lo hace en extremo perturbador y peligroso.

  No es la primera vez que la ciencia ficción explora la idea de un androide, robot o sistema tan avanzado, que incluso podría poner en duda qué es lo que nos hace realmente humanos. Los hemos visto batallar con nuestra irracionalidad y con nuestros impulsos. Uno de los mejores ejemplos probablemente sea el de HAL 9000. Construido para procesar información de forma precisa sin distorsiones ni detalles ocultos, al recibir órdenes de mantener en secreto la razón de la misión, recibe un boleto de ida a la locura y la paranoia. También hay casos opuestos, como el de Ash en “Alien”. Si bien Ash fue capaz de “admirar” al Xenomorph, su relación con el resto de la tripulación estaba más inclinada hacia la indiferencia, y probablemente el desprecio. Ash se encontró en un marco de comodidad inusitado cuando la Compañía declaró “prescindibles” a sus compañeros, y no dejó ver ningún conflicto al respecto.

Y ahora, tenemos a David, una de las “estrellas” que hará acto de presencia en Prometheus. En un comienzo, David demuestra que “puede ser robot” cuando le conviene, al admitir que no tiene problemas en colocarse más allá de la ética a la hora de llevar a cabo ciertas órdenes, una indicación de algunas de las características de Ash. También demuestra una empatía similar a la de Bishop en “Aliens”. Los humanos logran interactuar de forma más eficiente y cómoda con David, tomarlo como “uno más” del grupo sin mayores inconvenientes. Probablemente el punto más interesante de David surge cuando dice que puede entender las emociones humanas, pero no sentirlas por sí mismo. ¿Sería eso suficiente para realizar una emulación adecuada? ¿Podría David superar esa última barrera entre la interpretación y el sentimiento? ¿Y cómo reaccionaría si así lo hiciera?

Todas estas dudas y otras más probablemente sean resueltas cuando Prometheus llegue a nosotros el próximo 15 de junio. Hasta este punto, tanto Fox como Ridley Scott están haciendo un sólido uso del material viral para estimular el interés por la película. Las referencias no-tan-ocultas a Alien son suficientes como para que vayamos a verla sin estos cortos adicionales, pero el vídeo de David nos obliga a pensar en algo que ya hemos considerado en otras oportunidades. ¿Cómo reaccionaríamos nosotros al trabajar con un androide como David? ¿Cómo sería saber que puede superarnos en todo aspecto, incluso en aquel que parecería más lejano, como el “ser” humano (y no necesariamente uno "bueno")? La tecnología aún está muy lejos, pero en algunos cientos de años, ¿quién sabe? Para cerrar, debemos reconocer una cosa: El trabajo de Fassbender hasta aquí, es fabuloso.